El silo bolsa es una solución económica para el almacenaje de grano pero presenta una serie de limitaciones y desventajas frente al almacenaje en silos metálicos.
Estas son algunas de las ventajas de almacenar el grano en un silo metálico frente al silo bolsa:
- El silo metálico asegura unas condiciones óptimas para el grano durante más tiempo.
El silo metálico se puede equipar con un completo sistema de control de temperatura y ventilación, que asegura el mantenimiento del cereal en condiciones óptimas. Esto resulta imposible en los silos bolsa, no siendo por tanto adecuados para almacenamientos prolongados.
- Mayor capacidad de almacenaje en menos superficie.
Otra desventaja del silo bolsa es su limitada capacidad unitaria, cada bolsa no suele superar las 200 T, y al tratarse de un tipo de almacenamiento horizontal, el silo bolsa ocupa grandes superficies de terreno mientras que el silo metálico por su disposición vertical permite una mayor capacidad de almacenaje en menos superficie.
- El silo metálico es adecuado para almacenar grano con mayor contenido de humedad.
El almacenaje de grano con mayor contenido de humedad no es recomendable en el silo bolsa, ya que se podrían producir fermentaciones con el consecuente calentamiento del grano, lo cual conlleva el inevitable deterioro de su calidad. Además, a medida que los granos penetran en la bolsa se expulsa una gran cantidad de oxigeno, con lo que el grano se almacena en un ambiente rico en dióxido de carbono. Esa falta de oxigeno favorece la fermentación del grano y su deterioro. No olvidemos que el proceso de fermentación es anaeróbico, ya que se produce en ausencia de oxígeno.
- Evita los problemas de humedad en caso de lluvias.
Otra desventaja del silo bolsa frente al silo metálico son las frecuentes roturas del film plástico, ya sea por ataque de roedores o causado por algún elemento mecánico trabajando en su proximidad, con los consiguientes problemas de humedad en caso de lluvias.
- El silo metálico facilita la descarga.
No hay que olvidar la dificultad que presenta el silo bolsa para descargar el grano almacenado, lo que conlleva un inevitable deterioro del grano por roturas o pérdidas al caer al terreno. El silo metálico sin embargo puede equiparse con diversos sistemas mecánicos de descarga, según el tipo de grano y la capacidad de transporte requerida.
Por todo lo anteriormente expuesto el uso del silo bolsa no se justifica incluso considerando su menor coste de inversión frente al silo metálico, no debiéndose nunca olvidar el valor económico y en tiempo invertido del grano que se almacena.